70 DÍAS EN RUSIA – Lo que yo ví

La Revolución Sovietica llevó por primera vez a la clase trabajadora a la cima del poder en un estado. Esto despertó la alarma de las clases dominantes de todo el planeta y a su vez desportó la admiración y la esperanza en millones de trabajadores. Muchos de los movimientos obreros del mundo enviaron a este nuevo estado proletario delegaciones y observadores para analizar el proceso y aprender de él. El anarquismo ibérico hizo lo propio y su delegación redactó un informe desfavorable (no fue el único) de lo que allí estaba ocurriendo. Uno de los miembros de aquella delegación anarquista fue Angel Pestaña, conocido miembro del ala más posibilista y moderada de la CNT. Tras visitar la URSS en  1920, y tras pasar por prisión a su regreso al Estado Español, Pestaña redacta en 1924 este libro ahora reeditado. Sus entrevistas con Lenin, Trotsky y otros dirigentes bolcheviques fueron respetuosas e incluso cordiales, pero la deriva autoritaria y el uso del terror de Estado por parte de los bolcheviques hizo que su valoración del proceso fuese negativa (al igual que lo fue el informe del delegado francés Gastón Leval) lo cual alejaría a los anarquistas hispano-franceses (y por tanto a la mayor parte de los obreros de ambos Estados) de la órbita de la URSS. Una de las primeras críticas desde la izquierda al régimen burocratico-policiaco que se estaba gestando en la URSS y que traicionaría muy pronto el espíritu original de los soviets.